¿Por qué deberías asistir a nuestros talleres de vida?
100% energía día con día
Este primer evento de tipo Taller, fue considero un gran éxito por el aprendizaje práctico para todas las personas que pudieron asistir. El objetivo es tomar las riendas de nuestra vida. Y como se aprecia en el título “meter las manos en la masa”. Que para mí significa realmente ser presentes y responsables en cada momento de nuestra vida. Y así poder tomar las decisiones correctas.
Entonces, con esto en mente, platicamos en el taller acerca de cómo se compone la vida, desde un punto filosófico, pero sobre todo enfocado a la energía, eso que tanto se habla en hoy en día. Queremos tener la energía suficiente para realizar cuantas más tareas se puedan día con día. Y a su vez ofrecimos las bases del porqué nuestro cuerpo siempre nos está ofreciendo, ese 100% que tanto buscamos. Porque ya es parte de nuestra vida, la vida es un absoluto, no existe 70% vida, o 10% muerto. Y lo mismo aplica para la energía (100%), pero donde radica la diferencia, está primero en hacer las preguntas correctas, y segundo tomar acción, y meter las manos en nuestra vida.
¿Esperar a tener síntomas o cuidar la vida diariamente?
LO QUE SUCEDE DENTRO DE NUESTRA SOCIEDAD
Hoy, más que nunca, pensamos que el tener salud y estar vital, es no tener síntomas, sin embargo, también se nos hace normal el dormir 3-4 horas por la noche, tener síntomas respiratorios constantemente, y nada de energía durante el día.
Existe una gran historia, la historia de los deseos de año nuevo.
Como muchas familias, había una que se reunía año con año, y tenían una dinámica de metas proporcional a la edad y el mayor, no solo tenía el mayor número de metas, sino por su experiencia, él siempre cumplía la mayoría; además nunca tenía síntomas, dolores, nunca estaba “enfermo”. Sin embargo, él pasaba mucho tiempo trabajando. Y de manera repentina e inesperada, empezó a decaer su salud. Tenía mucho dinero ahorrado de tanto trabajar, que quería usar en viajes que tenía planeados desde muy joven, y quería dejar a su familia vienes, así pudieran vivir mejor.
Pero cada vez pasaba más tiempo en hospitales, y en medicamentos, poco a poco iban disminuyendo sus ingresos.
Cuando la familia se reunió de nuevo, todos estaban “felices de estar otro año juntos” y a la hora de que empezaran a formular sus metas para el año siguiente. Hubo una persona, no pudo lograr ni la mitad, y ese año solo tenía un ÚNICO deseo. ¿Adivinen quien era? Exacto, cuando no tenemos salud, solo tenemos un único deseo, recuperarla…
¿A dónde te gustaría ver a tu familia? Seamos conscientes que la vida se cuida del diario y tenemos que darle su tiempo y espacio.